La NASA lanzó la sonda Europa Clipper, con el objetivo de explorar el potencial astrobiológico de la luna Europa, un satélite natural de Júpiter.
La nave espacial Clipper, la más grande construida por la agencia espacial estadounidense para una misión planetaria, partió el lunes último desde el Centro Espacial Kennedy en Florida a bordo de un cohete Falcon Heavy de SpaceX, con el propósito de investigar si existen condiciones para la vida bajo la capa de hielo que cubre Europa.
La misión Europa Clipper busca determinar si la luna, que se encuentra a más de 770 millones de kilómetros de la Tierra, podría albergar vida en su océano subterráneo.
Satélite
El interés científico por este satélite se basa en evidencias previas que sugieren la existencia de un vasto océano salado bajo la superficie helada, con una cantidad de agua líquida que podría duplicar la de todos los océanos de la Tierra combinados.
Además, los ingredientes básicos para la vida, como agua, compuestos químicos y fuentes de energía, podrían estar presentes en el entorno de Europa.
Clipper recorrerá 2.900 millones de kilómetros hasta llegar a Júpiter en aproximadamente seis años. Después de su llegada en 2030, la nave tomará un año adicional para ajustar su órbita antes de iniciar una serie de 49 sobrevuelos a solo 25 kilómetros de la superficie de la luna.
Esta serie de sobrevuelos permitirá a la nave recopilar datos cruciales para entender la geología, la composición y el espesor de la capa de hielo de Europa, y cómo interactúa con el océano subterráneo.












