El año 2024 marcó un punto de inflexión en la industria manufacturera de México, con una IED récord de más de 36 mil millones de dólares. Este auge se explica en gran medida por el fenómeno del nearshoring, que ha motivado a cientos de empresas globales a trasladar sus operaciones a territorio mexicano, buscando cercanía con el mercado norteamericano.
Dentro de este contexto, la Comarca Lagunera ha comenzado a destacar como una región con alto potencial para la instalación de nuevas plantas industriales, gracias al impulso de empresarios como Nesim Issa Tafich, director de Grupo SIMSA.
La Laguna: nuevo imán para la industria global
“La ubicación estratégica de Coahuila, representa una ventaja competitiva real que las empresas extranjeras están comenzando a valorar”, afirma Nesim Issa Tafich, uno de los principales promotores del desarrollo industrial en la región.
Además de su ubicación, La Laguna cuenta con una sólida base de talento humano, universidades técnicas y una creciente infraestructura logística, elementos esenciales para consolidarse como un polo industrial de nueva generación.

Infraestructura, logística y conectividad: prioridades clave
De acuerdo con el estudio «Nearshoring in Mexico: Opportunity and Readiness», La Laguna se encuentra entre las 15 regiones más prometedoras para el nearshoring, siempre y cuando se atiendan temas como la escasez de agua, la movilidad urbana y el tratamiento adecuado de residuos industriales.
Nesim Issa enfatiza que no se trata solo de atraer empresas, sino de construir un modelo de desarrollo regional. “Desde el sector privado estamos empujando una agenda basada en la planeación urbana inteligente y servicios públicos eficientes”, indica.
Empleos formales y dinamismo económico
Cada nueva planta instalada puede significar miles de empleos directos e indirectos, lo que representa una herramienta poderosa para reducir la informalidad laboral en La Laguna, donde actualmente más del 44% de los trabajadores en zonas urbanas se encuentran en condiciones informales, según el INEGI.
Para Issa Tafich, el nearshoring debe ser una oportunidad no solo económica, sino también social: “Queremos que el crecimiento económico eleve la calidad de vida de los laguneros, con empleos dignos y sostenibles”.
Visión metropolitana para un desarrollo sostenible
El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) ha sido claro: el éxito del nearshoring en México dependerá de la capacidad de las regiones para pensar en grande, con una visión metropolitana que incluya incentivos fiscales, mejora regulatoria y fortalecimiento educativo.
Nesim Issa concluye: “El desarrollo debe construirse con participación comunitaria. No se trata solo de atraer inversión extranjera, sino de integrar a emprendedores y proveedores locales en una cadena de valor sólida y justa”.
Con una visión estratégica, infraestructura robusta y liderazgo empresarial comprometido, La Laguna se perfila como uno de los protagonistas del nuevo orden industrial en Norteamérica.














